Bueno, si vamos a empezar por un artista influyente en la escena punk, empezaremos por el más reconocido desde los pañales de este movimiento, Jamie Reid. Reid es un británico que nació en 1947, de siempre ha estado estrechamente relacionado con el arte e ideológicamente se considero anarquista, ha día de hoy desconozco si sigue comulgando con dicho ideal. También este personaje, ha estado ligado de muy de cerca con el situacionismo, del que se ha dejado influenciar, tanto para sus posicionamientos sociales, su mensaje y aspecto estético.
Jaime Reid es nada más y nada menos que el responsable de la imagen grafica de los Sex Pistols desde sus primeras publicaciones. Su relación con la banda vino dada de la mano de Malcom Mc Laren, quien le propuso, diseñar las portadas de los singles “Anarchy in the UK” y “Good save the Queen”y con quien ya había colaborado anteriormente. Poco más tarde le pediría la portada del primer LP“Never Mind the bollocks”, la portada era una apropiación de un empaque de detergente. Este disco fue censurado infinitas veces, por contener entre el titulo del disco la palabra cojones, incluso llegó a ser enjuiciado.
La estética de gran parte de lo que Reid produjo para los Pistols, es una clara herencia de los collages de Tristian Tzara, cosa que nunca desmintió. Pero lo que un día fue arte creado por dadá, hace 30 años fue, fue arte creado para el punk rock y que pese a haber transcurrido tres década, sigue siendo una forma de expresión aun vigente en este movimiento socio-político-musical.
Sus imágenes no solo querían decir, mirad esta es la tipografía de los Sex Pistols y esta su imagen grafica, también llevaba inscrito el “hazlo tu mismo”, coje unas tijeras, toma unas letras y unas fotos y crea tu propia obra, crea algo nuevo a partir de algo que esté a tu alcance. Todo esto junto con el sentimiento de provocación, de trasgresión, inconformidad, ruptura, descontento socio-político, que transmitieron sus montajes fotográficos, como por ejemplo, la noble bandera del Reino Unido, símbolo improfanable y sumun de lo respetable, que el presento hecha trizas; o la imagen de la vanagloriada reina de Inglaterra, con un imperdible de seguridad en los labios, para impedirle hacer uso de expresión, al igual que su policía hacia en los 70 con las reivindicaciones político-sindicales en las calles de Londres, o puede que fuese para no tener que aguantar, su sermón retrogrado y carcamal o quizás simplemente “para no tener que aguantar a esa vieja diciendo chorradas”.
Jaime Reid es nada más y nada menos que el responsable de la imagen grafica de los Sex Pistols desde sus primeras publicaciones. Su relación con la banda vino dada de la mano de Malcom Mc Laren, quien le propuso, diseñar las portadas de los singles “Anarchy in the UK” y “Good save the Queen”y con quien ya había colaborado anteriormente. Poco más tarde le pediría la portada del primer LP“Never Mind the bollocks”, la portada era una apropiación de un empaque de detergente. Este disco fue censurado infinitas veces, por contener entre el titulo del disco la palabra cojones, incluso llegó a ser enjuiciado.
La estética de gran parte de lo que Reid produjo para los Pistols, es una clara herencia de los collages de Tristian Tzara, cosa que nunca desmintió. Pero lo que un día fue arte creado por dadá, hace 30 años fue, fue arte creado para el punk rock y que pese a haber transcurrido tres década, sigue siendo una forma de expresión aun vigente en este movimiento socio-político-musical.
Sus imágenes no solo querían decir, mirad esta es la tipografía de los Sex Pistols y esta su imagen grafica, también llevaba inscrito el “hazlo tu mismo”, coje unas tijeras, toma unas letras y unas fotos y crea tu propia obra, crea algo nuevo a partir de algo que esté a tu alcance. Todo esto junto con el sentimiento de provocación, de trasgresión, inconformidad, ruptura, descontento socio-político, que transmitieron sus montajes fotográficos, como por ejemplo, la noble bandera del Reino Unido, símbolo improfanable y sumun de lo respetable, que el presento hecha trizas; o la imagen de la vanagloriada reina de Inglaterra, con un imperdible de seguridad en los labios, para impedirle hacer uso de expresión, al igual que su policía hacia en los 70 con las reivindicaciones político-sindicales en las calles de Londres, o puede que fuese para no tener que aguantar, su sermón retrogrado y carcamal o quizás simplemente “para no tener que aguantar a esa vieja diciendo chorradas”.
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